Hola, ¿que tal va todo? nosotros la verdad que andamos un poco liados con nuestras cosillas pero si eres de los que nos sigues en INSTAGRAM verás que estamos continuamente subiendo contenido.
Hoy te quiero mostrar un blog un poco especial, sois muchos los que me preguntáis como se desarrolla un día de trabajo, pues bien, te voy a adentrar un poco en una sesión que hicimos para la marca OWL CLOTHING donde contamos con algunos de nuestros modelos así como con chicos de Madrid.
En esta ocasión empezamos bastante temprano, teníamos por delante un duro día de trabajo ya que había que hacer fotos y vídeo de toda la nueva colección, eran muchas prendas, la mayoría de ellas unisex y la verdad que no es fácil dar con modelos que se asemejen al tipo de publico al que va enfocada la marca.
Montar un shooting es algo muy complejo aunque de eso no hablaremos ahora, tal vez en otra entrada.
Como te decía empezamos muy temprano, a las 8 de la mañana ya habíamos estado tirando en exteriores y hay que tener en cuenta que esta campaña la hicimos por el mes de Noviembre del pasado año así que imagina como estaban los modelos a esa hora, llegamos al estudio que teníamos preparado y mientras montábamos la iluminación y demás los modelos tenían un pequeño desayuno preparado para reponer fuerzas, era momento de relax, desconectar un poco y ver redes sociales, contestar Whatsapp y todo eso que hoy en día nos requiere tanto tiempo.
Ya teníamos todo listo y mucho trabajo por delante, los modelos entraban en el set con la ropa que se le iba entregando y era la hora de seguir haciendo su trabajo pero ahora el entorno requería otro tipo de actitud frente a la cámara, las fotos en exteriores son mas informales y te dan cierta libertad ya que en este caso eran para el lookbook y redes sociales, ahora había que trabajar sobre un limbo en el que solo se vería la prenda y el modelo, había que obtener fotos de plano medio y cuerpo entero, posteriormente se harían las de detalle.
La verdad que cuando estás trabajando entre buena gente todo es buena vibra, los momentos que se viven fuera del set son los que nunca se ven y si bien es cierto que al final las fotos que se obtienen son las importantes, lo que pasa durante el shooting es tan importante o más ya que aunque no lo creas el estado anímico en el que los modelos y el fotógrafo se encuentre, así como estilista y demás gente que participe en el shooting, es muy influyente en el desarrollo del trabajo, todo se contagia.
Está claro que esto es un trabajo pero con los años he aprendido que si no te diviertes no tiene sentido aquello para lo que estás trabajando.
Nos leemos.
PAZ Y AMOR!!
